Los libros anteriores a la aparición de la imprenta se denominan manuscritos. Fueron escritos por monjes en los scriptorium de los monasterios. Su ejecución era llevada a cabo por hombres de gran habilidad artística y preparación doctrinal.
Estos manuscritos se realizaban sobre pergamino, formados por hojas rectangulares dobladas por la mitad y metidas unas dentro de otras, cosidas por su doblez y cubiertas por tapas, que con frecuencia se decoraban y ennoblecían con metales repujados y piedras preciosas.
El idioma empleado era latín y se utilizaban distintos tipos de letra. Al principio se usó la minúscula visigótica y ésta fue posteriormente sustituida por la carolingia. Los temas tratados son en su mayoría de tipo litúrgico y en ellos destacan ilustraciones de fuerte colorido. Estos dibujos se denominan miniaturas, pues el minio era utilizado como pigmento para dar color a los dibujos y letras capitales.
1 comentario:
Me agradan los manuscritos .
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